Frases que inspiran

"Nunca atribuyas a la maldad lo que puede ser explicado por la estupidez"

Principio de Hanlon


sábado, 30 de abril de 2011

Game over? De momento NO

Aunque el implacable contador de deuda avanza imparable, las autoridades que presuntamente están al cargo de la gestión de semejante “infierno financiero” aseguran que todo está controlado. Los vaticinios apocalípticos no se hicieron esperar, pero como suele ser habitual, tras los chanchullos de las negociaciones parlamentarias y los ruegos del ganador del Nobel y dos premios Grammy , Barack Obama, se concilió un acuerdo en los últimos minutos.

Unas pocas migajas menos no lograrán regenerar la tarta que falta

Puede parecer un tijeretazo milmillonario, de hecho lo es. Pero no es nada en comparación con el montante total de la deuda americana. Puede ayudarnos a tomarlo en perspectiva el siguiente hecho: en la semana de negociaciones, el tesoro americano emitió deuda por un valor superior al monto del recorte aprobado por el Congreso.


Muchos no quieren reconocer lo obvio, las deudas deben pagarse. Y al hablar de deuda soberana, se incurre en algo particularmente injusto, cargar a las generaciones de futuros contribuyentes las facturas de los gastos que disfrutaron sus padres (e incluso sus abuelos).

La inmensa mayoría de la población, no es sólo propio de la clase política, suele olvidar este hecho tan simple. Sólo de vez en cuando, cuando se les recuerda que todos esos programas de gasto no pueden continuar como hasta ahora, se dan cuenda de todas las insensateces cometidas. Así tenemos a Obama declarando que: “en el año 2000, la administración federal arrojó un superávit. Después se decidió recortar impuestos a todo el mundo, incluyendo a multimillonarios, se libraron dos guerras y el estado pasó a cubrir el coste de las medicinas. Al final todo se termina pagando.

No quiero dejar de resaltar que soy partidario de unos impuestos mínimos siempre dentro de un presupuesto equilibrado. Bajarlos y mantener el gasto es transferir en el tiempo la carga impositiva. También cabe recordar que si los últimos años de la administración Clinton se saldaron con un superávit presupuestario fue porque tuvo en frente un congreso con mayoría republicana que frenó cualquier iniciativa de nuevo gasto que propusiera. Sabia reticencia que desapareció cuando un republicano ocupó la presidencia, llegando a concederse partidas de gasto tan electoralmente rentables como financieramente alocadas como esa que mencionaba Obama en último lugar, socializar el coste de los medicamentos de los jubilados americanos entre todos los contribuyentes. Como se ve, Bush es un poco más “socialista” de lo que muchos querrían reconocer, pero qué esperaban de un hombre bajo cuyo su mandato se cometió la insensatez de “nacionalizar” la banca.

Comparativa del rescate financiero con otros multimillonarios dispendios del gobierno americano
(ajustada la inflación)

No diré que coincido sin más con aquéllos que hubieran preferido que EE.UU. se sumiera en una parálisis presupuestaria con el consiguiente cierre del gobierno federal, opinando que hubiera resultado mejor que este raquítico retoque contable. Sin embargo, más temprano que tarde, se encontrarán de nuevo en idénticas circunstancias y más vale que para entonces no les tiemble el pulso a la hora de meter la tijera.

Cierto que la herencia recibida era realmente calamitosa y que los pasivos no financiados (ese “gasto social” que la progresía occidental asegura que NO existe en Estados Unidos) es básicamente insostenible. Pero igualmente tendremos que admitir que en los años que Obama lleva al frente del “despacho oval” ya ha cometido suficientes bravuconadas ejecutivas como para ser merecedor de un enjuiciamiento político”


Ésta es la deuda pública"oficial"

ÉSTA ES LA DEUDA REAL en 2008 ¡imagínense la actual!

Al menos en EE.UU., se da la curiosa circunstancia de que el propio presidente (el matrimonio Obama, para ser precisos ) paga más en impuestos de lo que cobra luego por su cargo electo. También resulta llamativo que pague más que la corporación que hasta hace poco dirigía su actual asesor económico. Empresa a la que, por añadidura, no le van nada mal los negocios. Pero descuiden, cuando no quede otro remedio que aumentar impuestos, buena parte de la carga recaerá en los auténticos herederos del espíritu emprendedor americano.

Volviéndonos a centrar en el tema que nos ocupa, nada parece indicar que en la ciudad del Potomac vayan a darse cuenta de lo obvio. Si estuviéramos hablando de una hipotética USA, S.A. estaríamos en las puertas de  una “suspensión de pagos”. Al encontrarnos ante la nación más poderosa del mundo, a pesar de algunos indicios de franca decadencia y creciente pauperización, todavía tienen cierto margen de maniobra. No obstante, olvidar que el actual rumbo de la nave es decididamente INSOSTENIBLE puede acelerar el trágico desenlace, por lo que no es de extrañar que el principal acreedor del “imperio americano”, el Partido Comunista Chino, empiece a temer por sus inversiones.

Hasta ese oligopolio instaurado por las autoridades reguladores americanas, no tiene más remedio que alertar de la pérdida de crédito como deudor, y hasta amenaza a la mano que le otorgó su posición de privilegio con retirarle la máxima calificación crediticia.

Para mayor inri, después de tantas reticencias para meter la tijera, nos enteramos de que casi no se ha tocado nada. Es lógico que nos preguntemos cuándo se ejecutarán los recortes. Hay quien opina que ya llegan tarde y que al Tío Sam no le quedará otro remedio que declararse en “quiebra”. Ante tan funesta perspectiva, los tecnócratas “globalistas” se relamen ante la inminente “caída del imperio yanqui”. No obstante, la realidad tiene otra cara y pareciera que la “tierra de las oportunidades” tiene derecho a prórroga.

De todas maneras, me sumo a los que opinan que los recortes son sólo parte de la solución. Se debe exigir total transparencia para minimizar los manejos bajo cuerda de los distintos apéndices de ese “monstruo incontrolable” en el que ha devenido el gobierno federal. Desde lo mínimo, como es gastar 550.000 dólares para promover la convivencia con las chinches, a la promoción de la democracia por todo el orbe, ya sea por medio de bombas o grupos subversivos, pasando por las “recompensas a los chivatos”, y pagar la nómina de la elefantiásica plantilla federal, incluidas aquellas ocupaciones que, simplemente, resultan bochornosas.

Decididamente, el recorte es INSUFICIENTE

Habrá quienes preferirían evitar cualquier cambio pero todos, en el fondo, sabían que papá-estado no todo lo puede . Al fin y al cabo como dijera Bastiat: “El Estado es la gran ficción en donde todo el mundo trata de vivir a expensas del resto” y no hace falta ser un experto para deducir que dicha actitud necesariamente no puede perpetuarse indefinidamente.

Hemos concluido que EE.UU. tiene un problema pero, no nos olvidemos, la Europa del llamado “estado del bienestar” lo tiene corregido y aumentado. NO podemos seguir cerrando los ojos ante esta cuestión ya que nos afecta a todos, en mayor o menor medida.

Y en España no vamos por el mejor camino. Al igual que “el amigo americano”, se asegura por activa y por pasiva que todo está bajo control. Sin embargo, algunos ya se han dado cuenta que la cuantía total de nuestra deuda es mayor de lo “oficialmente” admitido (noticia que no es nueva, por cierto), algunos analistas van más allá y cuantifican el agujero en cifras que asustan. Pero, claro está, éstos son sólo comentarios propios de “traidores”. La verdad es que algunos “periodistas”, que mal hicieron en no jubilarse cuando debieron, más valía que se preocuparan por la situación financiera de la empresa que les paga aunque no es descartable que vean esa coyuntura desde la cómoda perspectiva de un puesto directivo.

Para los que hayan notado que el orden en el que caen las fichas no es el correcto, les recordaré que España entró en “quiebra técnica” el pasado 7 de mayo de 2010.

En definitiva, esto es lo que merecemos por creer que podemos vivir hoy a costa de lo que produciremos mañana descuidando, además, la producción futura. Y si piensan que los americanos están mal, que lo están, mejor cerrar los ojos para no enterarnos de lo que sucede en nuestro propio suelo. El consejero de sanidad de la Generalidad catalana no ha podido ser más claro: “NO hay dinero”.


P.D. Espero que en unos días, voy a hacer un esfuerzo, haya logrado recabar suficiente información para formular un juicio suficientemente fundado sobre el estado financiero del sistema nacional de salud, dónde entraré a trabajar en pocos días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario